Pone Covid zancadilla al beisbol estatal
A más de un año que se dio el confinamiento en la población del estado de Chihuahua debido a la llegada del virus SARS-COV2, las cosas no parecen mejorar del todo, de nueva cuenta el estado inmerso en el semáforo naranja y las restricciones al deporte se activaron una vez más.
El Consejo Estatal de Salud es claro en sus lineamientos, no quieren tener brotes de coronavirus en ninguna rama del deporte, muchas vidas se han perdido ya como para también sumarle defunciones de deportistas por alguna falta de control, si no se tienen los controles que exige el Consejo, mejor no llevarlo a cabo, aun así fuera uno de los deportes más importantes en el estado, sin controles, no.
Las ligas nacional y estatal de baloncesto han implementado controles de sanidad, que aún así no han salvado a jugadores y entrenadores de padecer el virus, pero si han sido factores para detectarlos a tiempo y evitar más contagios. Pruebas PCR por semana a cada jugador, cuerpo técnico y staff, además de túneles sanitizantes, toneladas de gel y el aislamiento de equipos en hoteles, han sido parte de los controles que se han implementado y valga decirlo, han dado resultados óptimos en estas dos ligas.
Una Liga Estatal de Beisbol mas cara, con mas controles
Para que el Campeonato Estatal de Beisbol 2021 pueda llevarse a cabo, independientemente si es a puerta cerrada o no, deberán cumplir con los controles que marca el Consejo Estatal de Salud: pruebas PCR por semana a todos los jugadores y cuerpo técnico de cada uno de los 10 equipos, túneles sanitizantes en cada estadio, gel y en las giras, máximo dos jugadores por habitación.
Hablar de costos extras para poder tener todos estos controles, no es hablar de cantidades pequeñas. Cada equipo tendría que erogar como mínimo, cerca de 40 a 45 mil pesos por semana en pruebas PCR (tomando en cuenta que cada prueba tiene un costo de entre 700 a 900 pesos y cada equipo tiene un máximo de jugadores y cuerpo técnico de 45 personas). Ponderado a 10 semanas de temporada regular, cada equipo debiera invertir cerca de medio millón de pesos para únicamente pruebas de detección de covid.
Los túneles sanitizantes van desde los 25 a los 50 mil pesos cada uno, debiendo tener cada estadio dos, uno para cada equipo; además si se permitiera la entrada de público, se agregarían un túnel por cada entrada de aficionados. Aunado a esto, las toneladas de gel sanitizador para la afición y jugadores, termómetros para medir temperatura diariamente en cada persona.
En el supuesto que no se les obligue a aislar a los jugadores durante todo el torneo en un hotel, pero si sería necesario que en las giras se gastara el doble en habitaciones de hotel para que solo dos jugadores pernoctaran por cuarto, cuando en temporada anteriores bajo un panorama normal, eran 3 o 4 jugadores los que comparten habitación.
Los gastos son necesarios para garantizar una rápida detección de covid, sin embargo la inversión no será fácil para cada una de las 10 jurisdicciones, tomando en cuenta la posibilidad latente de que se juegue a puerta cerrada o en el mejor de los casos con un aforo reducido, implica el tener mucho menos ingreso por palcos y boletaje general, además de consumo de productos que de venden al interior de cada parque.
Entre pruebas PCR, túneles sanitizantes, habitaciones extras de hoteles, termómetros y demás insumos necesarios para cumplir con los controles que pide el Consejo Estatal de Salud, se estima que cada jurisdicción debería erogar al menos un millón de pesos extra, y con la dificultad de no tener público, tener poco patrocinio y con la amenaza latente de que en cualquier momento se pueda suspender el deporte rey, la cosa no está nada fácil.